He estado reflexionando sobre estas acciones, las cuales tienen el propósito de conducir los procesos de aprendizaje de una u otra forma. La educación formal, la heteroeducación viene de la mano del estado, sabemos cuáles son los formatos y fórmulas para robotizarnos, insensibilizarnos y hacernos funcionales al sistema capital. El desafío está en plantear acciones que creen otras realidades, que nos permitan ver a través del muro y descubrir que existen otro tipo de "familias". Una vez, en una escuela considerada alternativa, hablaban sobre la importancia de criar y educar a lxs niñxs en "comunidad". Que importante es entonces, esto que estamos haciendo, sentarnos, leer, estudiar, intercambiar, repensarnos y "crear acciones conscientes y justificadas para conseguir conductas y resultados concretos en los educandos".

El formato mamá-papá con sus trabajos fuera y dentro de casa de alquiler, es un invento impuesto, degradante y antinatural para cuidar y educar hijxs con salud, armonía y dedicación. Se entiende como necesario y urgente el comprometernos con el desarrollo integral en mi casa, en la de mi vecinx, en las escuelas, barrios, es decir, de nuestra sociedad toda.

Visualizarnos como una gran familia que se autoeduca.

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