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La Fabrika SubKultural: Historia y memoria de un espacio transformador en Temuco

La Fabrika SubKultural fue uno de los espacios más icónicos de la contracultura en Temuco, marcado por su impacto en la autogestión cultural y su conexión con un edificio cargado de historia. Este proyecto tuvo sus raíces en la Komunidad SubKultural, que inicialmente funcionó en el edificio donde actualmente se encuentra la lutería Orfeo, y posteriormente se trasladó a las ruinas de un antiguo edificio al final de la calle O’Higgins, junto a la línea del tren.


Demolición Fabrika Subkultural

El nuevo espacio, conocido históricamente como la Fábrica Rendel, se convirtió en el hogar de la Fabrika SubKultural y le dio su nombre. Este lugar, abandonado durante años, fue revitalizado por la comunidad subcultural, que lo transformó en un punto de encuentro para artistas, colectivos y movimientos alternativos. Su carácter industrial y deteriorado le otorgó un simbolismo especial, convirtiéndose en un epicentro de resistencia cultural en la región.


En este espacio, la Fabrika ofreció conciertos, talleres, exposiciones y actividades políticas, consolidándose como un símbolo de autogestión y creatividad independiente. Sin embargo, el deterioro del edificio, sumado a las tensiones con las autoridades locales y la presión inmobiliaria, culminó en su demolición, marcando el fin de una etapa crucial para la contracultura local.


Lost in life en La Fabrika Subkultural

A pesar de ello, la Fabrika dejó una profunda huella en la memoria de Temuco, al punto de ser mencionada en instancias oficiales como el Consejo Municipal. En el acta de sesión del 14 de junio de 2022, se hace referencia a la ex Fábrica Rendel y su conexión con la Fábrica Subcultural, reconociendo su pasado como un espacio alternativo que marcó una época para la juventud y la cultura en la ciudad. Este reconocimiento formal destaca la importancia de la historia del edificio y su impacto en la comunidad, reafirmando el valor simbólico de los espacios recuperados para fines culturales.


El legado de la Fabrika también se revitalizó en enero de 2022, cuando un grupo de personas organizó una tocata y jornada de recuperación de un espacio comunitario, buscando reactivar el lugar que alguna vez albergó la Fabrika SubKultural. 


Durante esta jornada, se realizó una limpieza y una olla común como gesto de autogestión y memoria, reivindicando la importancia de rescatar espacios abandonados y darles un nuevo sentido comunitario.


Muchos de quienes participaron en la Fabrika continuaron su labor cultural y social en otros proyectos, como el espacio Fentxen Mañum, que mantiene vivo el espíritu de la autogestión y la resistencia cultural en Temuco. 


Sangre feral en La Fabrika Subkultural

La historia de la Fabrika SubKultural y de la Fábrica Rendel es un testimonio de cómo los espacios abandonados pueden ser resignificados a través del trabajo colectivo, convirtiéndose en núcleos de creatividad y resistencia. Aunque ya no exista físicamente, su legado perdura en la memoria colectiva y en las nuevas generaciones que siguen luchando por espacios de expresión y transformación cultural.



Fuentes:



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